top of page

Escribiendo historias...

Si yo te digo que tengo un carro que corre a mil millas por hora, pero siempre que me ves en él solo me ves llega a 500 millas por hora, ¿me crees? Entonces,


¿cómo somos la evidencia de un Dios muy grande con batallas muy pequeñas?

La respuesta es que no es posible. Nosotros, los hijos de Dios, estamos llamados a vivir experiencias que puedan mostrar a otros lo INCREÍBLE y MARAVILLOSO que es nuestro Dios.

Yo miro a todos los hombres y mujeres de Dios que admiro y todos tienen una historia que contar y todas esas historias están compuestas de grandes batallas donde parecía que casi perdían, pero ellos tenían la convicción de que Dios lo haría una vez más. Quiero que sepas que no estoy hablando de David derrotando a un gigante, ni de el pueblo de Egipto cruzando el mar rojo… No estoy hablando de la disposición de Abraham de entregar a su hijo, ni Noé construyendo el arca, tampoco de la mujer del flujo de sangre ni de José con sus hermanos que querían matarlo…


Estoy hablando del profeta que Dios sanó de un cáncer que los doctores dicen que se supone que lo matara, de los pastores que sembraron a su hijo, de la mujer que tenía cáncer y le dijo a su doctor “esta es la última vez que me ves aquí” … Estoy hablando de la mujer que le dijeron que era estéril y dijo que no lo recibía y tuvo 2 hijos, estoy hablando de aquella que perdió más de un embarazo, pero no se rindió y hoy tiene dos victorias en sus brazos… Estoy hablando de lo que yo veo DÍA A DÍA que mi Dios sigue haciendo en las personas que me rodean.


¿Por qué pienso en todo esto? Porque cuando pasamos procesos muy duros y dolorosos es muy fácil preguntar porqué, pero la pregunta correcta es para qué. ¿Qué Dios quiere mostrar con mi proceso de vida? ¿Qué atributo de Él quiere resaltar? ¿Qué quiere enseñar de Él mismo a los que me rodean? ¿Qué me quiere enseñar a mí?


Cuando yo entiendo eso, puedo vivir de una manera diferente, y entiendo que mi vida es una historia más para glorificar a Dios.

Mi vida es el escenario perfecto para que en medio de las pruebas y los problemas Dios muestre su gran poder. Nuestras variables son diferentes pero nuestro denominador común es Dios, así que nuestro resultado TIENE QUE SER GLORIOSO. Yo miro de izquierda a derecha a las personas que Dios ha puesto a mi alrededor y veo su mano obrando con poder, no porque todo es color de rosa, ni fácil, sino porque en medio de lo duro sus hijos deciden CREERLE todo lo que ha dicho.


Nuestra vida en Él es plena y abundante. ¿Sin dificultades? No, pero con una certeza de que Él ya venció y podemos estar en PAZ. Te invito a que cambies el lente con el cuál miras los procesos duros de tu vida, y que los comiences a ver como lo que son, una plataforma para exponer a nuestro Dios, sus milagros, sus proezas y su maravilloso poder.


Como dice mi Pastora, tú y yo estamos llamados a HACER HISTORIA DE LA BUENA. ¡No te quites! Aún hay mucho por escribir.

Les bendigo,

Bianca

22 views0 comments

Recent Posts

See All

Su orden

Comments


bottom of page